Vivimos en una época de constante avances tecnológicos. A algunos ya nos costó asimilar, en su momento, la idea de que pudiésemos conectarnos a Internet de forma inalámbrica. Pues…preparaos: ¿Y si os digo que la tecnología residente en las bombillas LED puede resultar en un tipo de conexión aún más rápida que el WiFi? Veamos cómo:
Científicamente hablando, WiFi transporta los datos a través de ondas electromagnéticas, concretamente a través de microondas. La reciente tecnología LIFi también transporta los datos a través de ondas electromagnéticas, pero en el espectro de la luz visible (aquellos colores que puede percibir el ser humano). He aquí lo interesante: con cualquier bombilla LED (que emite luz en el espectro visible) usando un modulador, básicamente, se puede transmitir datos. Parece algo ideal e incluso utópico que con las bombillas LED de nuestras casas puedan usarse como routers que experimentalmente ya ha mostrado velocidades 100 veces superior al WiFi. Y no sólo gana al WiFi en cuanto a velocidad, sino que permite ser una tecnología más ecológica: a la vez que ilumino una estancia, tengo conexión a internet.
A estas alturas os estaréis preguntado: ¿Por qué no se usa ya?
Cómo toda innovación tecnológica en fase de desarrollo y mejora, presenta sus inconvenientes. Y la principal es que el receptor que recoge esa luz de la bombilla LED para que podamos conectarnos a Internet, presenta unas dimensiones enormes que no son propias para el uso doméstico. También nos encontramos con que, una bobilla LED puede iluminar un espacio delimitado (ver imagen) por lo que, si quisiésemos usar Internet en dos habitaciones a la vez, tendríamos que tener encendidas dos bombillas, con sus dos receptores, moduladores, etc. Lo que a nivel doméstico es un gran gasto así que también se trabaja en mejorar ese aspecto y que con sólo una bombilla se pueda recoger luz suficiente para el uso de Internet de un hogar.
Aún así, experimentalmente ya se ha demostrado su capacidad y uso y es, cuestión de tiempo, que la tecnología WifI deje paso a la LIFi, como en algún momento, dejamos de conectar nuestra torre de ordenador a la red para poder navegar con nuestro portátil tumbados en la cama. Así que las bombillas LED, aparte de traernos una iluminación de bajo costo y gran calidad, nos van a permitir conectarnos a Internet cuando se consiga adecuar a su uso cotidiano.
A ver cómo explicamos a nuestros abuelos que, con una bombilla nos podemos conectar a Internet…
Amanda Torres Cantarero